4 de julio de 2009

Trece colonias y una Serpiente



Esto no tiene nada que ver con la independencia de Gran Bretaña. Se trata de un alegato a favor de la unidad en la defensa de las trece colonias durante la Guerra Franco-India. Desempeñó un frente común a la superstición de la época: una serpiente que se había cortado en trozos podría volver a la vida si se sumaron a las secciones juntos antes de la puesta del sol.

La ilustración de la serpiente fue reimpresa en todas las colonias y la serpiente de Franklin se convirtió en un símbolo de identidad nacional.

La serpiente como símbolo vino diez años más tarde, cuando se volvieron a unir a los estadounidenses contra un enemigo común.

La ilustración de la serpiente fue reimpresa en todas las colonias y la serpiente de Franklin se convirtió en un símbolo de identidad nacional.

La serpiente como símbolo vino diez años más tarde, cuando se volvieron a unir a los estadounidenses contra un enemigo común.

En 1765 el enemigo común es la ley del timbre (Stamp Act). Los británicos decidieron que necesitaban un mayor control sobre las colonias, y sobre todo, que necesitaban más dinero de las colonias (debido principalmente a la deuda de la Guerra Franco-India).

¿Por qué no los norteamericanos – “plantados por nuestros niños la atención, alimentados por nuestra indulgencia”, como dijo Charles Townshend de la Cámara de los Comunes – saldarán la deuda de Inglaterra?

El Coronel Isaac Barré, que había luchado en la Guerra Franco-India, respondió que las colonias no habían sido plantadas por el cuidado del gobierno británico, que había sido establecida por las personas que huyen de ella. Y el gobierno británico no había alimentado las colonias, que habían florecido a pesar de lo que el gobierno británico hizo y no hizo.

En este discurso, Barré se refiere a los colonos como “hijos de la libertad”.

En los siguientes meses y años, los Hijos de la Libertad se sintieron cada vez más resentidos de las interferencias inglesas. Como las mareas de la opinión pública norteamericana se trasladaron más cerca de la rebelión, la serpiente desmembrada de Franklin, sigue siendo utilizada como símbolo de la unidad de América, y la independencia americana.

Un ejemplo de ello, en 1774 Paul Revere añadido a la cabecera de El Espía de Massachusetts y mostró la serpiente luchando contra un dragón británico.